La mujer hispana acusada de matar a sus dos hijos en Kenosha ya enfrenta cargos criminales.

Lucia Hernandez Álvarez enfrenta una condena de cadena perpetua si es encontrada culpable de dos cargos de homicidio intencional en primer grado. La policía dice que ella confesó de haber matado a su hija Alicia de 3 años y Javier de 1 año. 

El reporte criminal indica que Hernandez Álvarez le dio medicina a sus dos hijos para drogarlos y luego sofocarlos con bolsas plásticas.

El padre de los niños, Juan Javier Arellanos, encontró a sus hijos muertos en un cuarto junto a su madre la madrugada del sábado al regresar del trabajo.

Durante la audiencia en corte el jueves, las autoridades revelaron que en la escena del crimen, Hernandez Álvarez había escrito varias notas en la pared con su sangre. Uno de los mensajes decía "Mi amor Javier."

La mujer de 34 años confeso que mató a sus hijos y trató de suicidarse porque estaba deprimida y tenía problemas con su pareja. Al parecer, la pareja tuvo una discusión la noche antes del crimen. 

Hernandez Álvarez dijo que ella estaba molesta porque el se fue a su trabajo una hora y media antes de su horario normal, lo cual para ella significaba que él quería estar más con sus amigos que con ella.

Las autoridades revelaron que Hernandez Álvarez escribió un diario con detalles de cómo mató a sus hijos.

Reportes también indican que ella bebió alcohol, tomó pastillas y se cortó sus brazos para suicidarse.

Algunos familiares de Hernandez Álvarez estuvieron en corte pero no quisieron hablar frente a los medios de comunicación. 

Hernandez Álvarez tendrá que presentarse en corte de nuevo el 25 de septiembre.